Los orÃgenes de esta raza son muy antiguos, por lo que se le considera el padre de los Spaniels.
Los documentos oficiales testifican y certifican la presencia de esta raza en el Reino Unido son del año 1812.
En 1902, es cuando el Kennel Club inglés, le da a la raza el nombre de English Springers other than Clumber, Sussex and Field.
Esto hizo que en la actualidad se le conozca como el más antiguo de los perros de caza Made in Britain.
Es un perro muy bueno para rastrear por el suelo y agua, tiene una complexión robusta y carácter enérgico.
CaracterÃsticas
Es un perro de talla mediana, con una altura hasta la cruz de 50 cm. y pesa de 17 a 20 kg.
Es un animal esbelto, las patas y el cuerpo son robustas, grandes y muy largas.
Los ojos son grandes, expresivos y de color avellana oscuro.
El hocico es ancho con orejas caÃdas y largas.
El pelo no es muy largo, lacio y denso.
Personalidad
Son animales muy buenos para la caza, trabajando tienen una relación muy estrecha con el dueño.
Son perros con mucha energÃa, juguetones y muy inteligentes.
Para el adiestramiento es un animal sencillo.
Esta raza tiene la necesidad del cobro, lo cual es un problema porque mordisquea todo lo que tiene a su alcance si se queda durante mucho tiempo solo.
Por ello hay que socializarlo con otros perros y personas desde pequeño, aunque por lo general son bastante extrovertidos y simpáticos.
No suelen encontrarse bien en una caseta ni con una vida sedentaria, si se aburren comienzan a excavar.
Cuidados
Es un animal carnÃvoro, que lleva en la sangre el instinto de caza de pequeños animales.
Asà que es importante darle carne, en el pienso, húmedo o seco.
El pelo hay que cepillárselo todos los dÃas y bañarlo de vez en cuando.
Como tiene las orejas caÃdas hay que cuidarlas para que no acumule cera y se produzcan infecciones.
Las uñas hay que cortarlas de vez en cuando para que el animal no esté incómodo.
Hay que sacarlo a pasear y estimularlo mentalmente con juegos interactivos o adiestrándolo.
Problemas de salud
Infecciones de oÃdos.
Displasia de cadera y codo.
Dolor en articulaciones y artritis.
Sordera.
Problemas oculares como atrofia progresiva de la retina y ceguera.
Alergias cutáneas, con picores en la piel por la alimentación.
Hipotiroidismo.
Epilepsia.